viernes, 24 de junio de 2011

DESCANSE EN PAZ, BRIAN HAW

El pacifista británico Brian Haw, que durante años acampó frente al Parlamento en el centro de Londres para protestar contra las guerras de Irak y Afganistán, ha muerto a los 62 años de un cáncer de pulmón.


Haw, que estaba siendo tratado de su enfermedad en Alemania, murió el sábado en ese país mientras dormía, señalaron sus allegados.

El manifestante, que logró agrupar a su alrededor a numerosos seguidores, luchaba últimamente en los tribunales por volver a su lugar de acampada, del que había sido desahuciado en marzo por el alcalde de Londres, el conservador Boris Johnson, siguiendo una orden del Tribunal Superior.

El excéntrico pacifista, a quien podía verse rodeado de pancartas, eslóganes y fotografías de conflictos, se estableció en 2001 en la plaza del Parlamento para protestar contra la política exterior del Reino Unido y Estados Unidos, primero por las sanciones contra Irak y después por los sucesivos conflictos en ese mismo país y Afganistán.


Durante los últimos años, hubo muchos intentos de expulsarle y dificultar su protesta por parte de las autoridades municipales y el propio Parlamento, que en el 2005 aprobó una ley prohibiendo protestas no autorizadas en un perímetro de una milla, que Haw eludió con el argumento de que su iniciativa era anterior a la aprobación del texto.

Tras su muerte, los portavoces de su "Campaña por la paz" le han rendido homenaje en su página web.


"Brian demostró una gran determinación y coraje durante los duros y largos años en los que lideró la "Campaña por la paz" en la plaza del Parlamento, durante los cuales está bien documentado que fue perseguido sin tregua por las autoridades, lo que afectó a su salud", declaran.

En su batalla contra el cáncer, añaden, "era muy consciente" de que "muchos civiles en Irak, Afganistán o Palestina no tenían acceso a los mismos tratamientos a los que él podía acceder".

"El Parlamento, la Policía y los tribunales deberían sentirse avergonzados para siempre de su penoso comportamiento hacia Brian", aseveran sus seguidores.

Varios diputados laboristas, entre ellos Jeremy Corbyn y John McDonnell, rindieron hoy tributo al compromiso de este pacifista, que durante una década desafió al duro clima británico para condenar la futilidad de la guerra desde una tienda de campaña.

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